Es curioso como tenemos la memoria tan atrofiada. Y no es por culpa del Alzheimer.
No hace ni tan siquiera un año, muchos de los integrantes de la foto de familia de la cumbre hispano-germana, vivían en la trinchera del estado del bienestar. Muchos de ellos como Saulo súbito, han caído del caballo y están desmontando la que decían era su atalaya, para evitar que los descabalguen de nuevo.
¡Qué foto, Señor, que foto! Y ya nos tenemos que ir acostumbrando a que esto vaya a ser lo habitual.
Lo que más me llama la atención es como la clase proletaria se traviste y se pone corbata. No recuerdo ninguna foto del Sr. Cándido Méndez, con corbata, ni ninguna otra reverencian como la que le brindó a la Sra. Merkel. Además, vigilado por el ministro Sebastian (el de los cafés y la subida de la luz), sonríe al lado del Sr Alierta, que lleva varios días contentísimo, porque personalmente, se le están quitando muchas pesos y problemas de encima y de camino se le están arreglando, como a sus colegas, los pesos sociales de sus empresas en España, pero sin acritud. Toxo está más serio y además nos hemos acostumbrado a su corbata, pero, en definitiva van de la mano; y ni que decir de los ministros y del Zapa, más que cara de alegría, la tenían de gusto…y es que Angela Merkel, primero nos enseñó , hace unos años ,su gran canalillo y ahora, .....nos la mete muy bien.
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